Entrevista del diario La Tribuna al presidente de la Cámara de Comercio, Mariano León

«No podemos soportar un sector público con tantos empleos y tan ineficiente»


 

Autor: Miguel Chaves 

Dentro de dos meses cumple su segundo aniversario al frente de la Cámara de Comercio e Industria de Ciudad Real. ¿Cómo ha sido este periodo? 

La verdad es que llegué en una época muy compleja y ha sido un periodo de reconversión desde el primer día. De hecho, antes de la decisión del Gobierno de eliminar el Recurso Cameral Permanente nosotros decidimos iniciar una estrategia de reconversión de la Cámara para que ésta se adaptase a una realidad distinta en la que había que hacer muchas más cosas con menos recursos. Han sido años de ajuste y de cambio radical. 

¿Cuál es la situación de la Cámara a día de hoy?

 Como consecuencia de haber adoptado medidas nada cómodas de ajuste desde el primer momento la situación actual de la Cámara es mejor que la de la mayoría de cámaras de España. Hemos cerrado el presupuesto de 2011 de forma equilibrada y también, pese a la caída de los ingresos, podremos hacer lo propio con el de 2012 gracias a ese ajuste brutal en el gasto que le comento. 

¿Es fundamental el apoyo del Gobierno para la subsistencia de las instituciones camerales? 

La financiación pública es imprescindible; de hecho, las cámaras de todos los países cuentan con esta financiación, ya que es necesario que se lleve a cabo un mix de financiación pública y privada en estos organismos. Esto es necesario porque la Cámara es una corporación de derecho público y la ley por la que se rige dice que debe tender al interés general. Por ello, si la financiación fuese eminentemente privada las cámaras defenderían solamente los intereses de aquellos que las financiasen. Si desaparece la financiación pública, desaparece el interés general de forma automática y no tendría sentido que continuasen las cámaras. 

¿Teme que desaparezca esa ayuda pública? 

Entiendo que la figura de la Cámara de Comercio debe existir por el interés económico del país. No sé lo que pasará, pero creo que no hay ningún país europeo que se haya planteado eliminar las cámaras de comercio y que no hay ninguna marca más potente en el comercio internacional que Cámara de Comercio. Sería un suicidio económico cargarnos el vehículo que permite a las pymes incorporarse al mercado internacional. En el caso de la provincia se cumplen ahora cien años desde los inicios de la Cámara de Comercio. 

¿Qué ha aportado a la provincia en ese siglo? 

La Cámara es de las pocas instituciones centenarias que ha sobrevivido a guerras civiles, mundiales y a cambios políticos. Ha hecho una labor que, sin ser milagrosos, consiste en estar del lado de la pyme siendo eficaces y eficientes. La de Ciudad Real tiene un buen departamento de Comercio Internacional desde hace mucho tiempo y no tiene solamente prestigio en el ámbito autonómico sino también en el ámbito nacional. De hecho, está considerado como uno de los mejores servicios de Comercio Exterior de las cámaras españolas y hemos gestionado muchas misiones de carácter nacional y ferias internacionales muy importantes. En definitiva, somos un sinónimo de internacionalización de las empresas desde hace muchos años. 

¿Cómo ve el presidente de la Cámara de Comercio el panorama empresarial en la provincia de Ciudad Real? 

La realidad empresarial de la provincia es muy parecida a la nacional. Hay una situación económica muy grave, ha habido una caída brutal de la demanda y del consumo que han hecho que las empresas hayan dejado de vender y a eso se la ha unido una crisis financiera que ha cerrado la financiación a las pymes. Además, esto se ha agravado aún más por la falta de cobro de muchas empresas por parte de las administraciones y eso ha hecho que la situación de las empresas sea dificilísima.

 ¿Recuerda años tan duros? 

Yo he vivido la crisis del 83, he conocido la del 93 y, sin lugar a dudas, creo que esta crisis es la más grave de las que yo he podido conocer. 

¿Hay salida? 

Entiendo que hay salida, pero no milagros. No podemos, como hemos hecho otras veces, esperar a que las cosas se solucionen porque sí. Ahora, al estar en un sistema con una moneda única, se puede salir, pero hay que trabajar mucho. Es imprescindible hacer ya todas las reformas que son necesarias para ello; con estas reformas me refiero a las que necesita el sistema financiero, el sistema laboral y la función pública. De hecho, es importantísimo que ésta se produzca, no podemos soportar un sector público con tal volumen de empleo como el que tiene actualmente España y con el nivel de ineficiencia que presenta, ya que eso es una barrera para la implantación de empresas en España. Estas empresas no entienden que en este país haya 14 legislaciones diferentes para poder instalarse en un territorio a trabajar. Hay que buscar la unidad de mercado. 

¿Qué opina de la ley de emprendedores de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha? 

Nosotros, sin lugar a dudas, la aplaudimos porque poner en primera línea a la figura del emprendedor como figura imprescindible para salir de la crisis es todo un acierto y un criterio que se debe trasladar a todo el tejido social. La figura del emprendedor es muy importante y desde la Cámara apostamos desde hace mucho, a través de la ventanilla única, por ayudar los emprendedores a la creación de su empresa con un sistema que le ayuda a desarrollar su idea y a hacer realidad su negocio. 

¿Cómo está funcionando esa ventanilla única? 

La ventanilla única está funcionando bien, pero debe hacerlo aún mejor. Con esto quiero decir que tenemos que hacer una importante labor de divulgación para que se conozca más y para que la utilice todo aquel que quiera poner en marcha una empresa. Este año que acaba de terminar se ha incrementado la actividad un 45 por ciento pese a la crisis y hemos firmado convenios con muchos ayuntamientos de la provincia para que conozcan el servicio y para que sepan que estamos ahí para ayudar al emprendedor. Creo que a final de año tendremos convenios con todos los ayuntamientos. A pesar de todas estas ayudas parece que la llave de la mejoría la tienen las entidades bancarias y la posibilidad de acceder al crédito. La financiación es fundamental y sin ella no se pueden crear empresas. Por ello, creo que el sector financiero tiene que poner en claro cuanto antes sus cuentas y llevar a cabo las reformas necesarias para una reconversión que es muy necesaria. Hay que sanear al sistema financiero para que pueda cumplir la función a la que está llamado que es facilitar el acceso al crédito de aquellos que lo necesitan. Aun así, será complicado que se recuperen todas las empresas que ya se han perdido. En la medida en que se pueda acceder al crédito y en la que, por otro lado, haya una recuperación de la confianza será cuando el empresario pueda acometer nuevos proyectos. La confianza, repito, pasa por abordar las reformas que son necesarias en estos momentos.  Precisamente no sobra confianza entre los empresarios y autónomos. 

¿Son ellos los principales paganos de la crisis?

 Sin ninguna duda. Ellos son los componentes principales del tejido empresarial español, y es que las pymes y micropymes suponen más del 90 por ciento de este tejido y junto a los trabajadores son los que sufren las consecuencias de esta situación de crisis. El empresario es el que crea los puestos de trabajo y el que consigue que, con la actividad empresarial, haya ingresos fiscales. De cara al futuro, hay que valorar la labor de las empresas y de los empresarios.

 ¿Qué opina de la subida de impuestos y de los cantos de sirena sobre un posible aumento del IVA? 

Esto lo tengo que mirar desde el prisma de la relación con la actividad económica y creo que la única forma de hacer frente al problema de endeudamiento generaliza que vive el país es una subida de impuestos, pero simultáneamente a dicha subida tiene que haber las reformas que se requieren. El aumento en la recaudación es necesario para luchar contra el déficit, pero no podemos mantener la misma actividad de gasto y para ello es necesario una política de saneamiento y reestructuración. Hay que refundar el país.  Entiendo que su petición para el nuevo Gobierno del país pasa por esas reformas en el sistema financiero y laboral. Y más reformas, como la dela función pública en la que pongo mucho énfasis.

 ¿Hablamos de una reforma unida a la productividad? 

Forma parte de la reforma que haya indicadores de productividad y de responsabilidad. Igual que el empresario y el ciudadano tienen una responsabilidad cuando actúan, la Administración debe ser igual de responsable, o más, y actualmente no hay ese equilibrio entre la responsabilidad del ciudadano y del empresario con la de las administraciones. De hecho, éstas deben mucho dinero y no pasa nada. Por otra parte, también le pediría a todos los partidos políticos que sean generosos y solidarios y que busquen el consenso en los temas más delicados, porque no está el país para discrepancias si queremos tener futuro. 

¿Pasa la recuperación también por la formación? 

Es imprescindible. Hay sectores, como la construcción, que nunca van a volver a tener el peso que tuvieron y ese personal hay que reciclarlo y eso pasa por la formación. No obstante, en España la relación entre FP y Universidad está a la inversa que en Europa; donde la FP tiene un peso muy importante y se nota en la oferta y la demanda. Eso hay que corregirlo. Hay que hacer una apuesta decidida por la Formación Profesional, que en países como Alemania está gestionada por la propia Cámara de Comercio, ya que esta cualificación nos permitirá salir de la crisis. 

¿Cuáles son sus deseos para el futuro? 

Sueño con la recuperación económica que es la que nos va a traer la recuperación social y la solución de problemas como el paro. Además, también sueño que los partidos políticos, y no solo el Gobierno, haya la suficiente inteligencia para adoptar acuerdos pensando más en el interés general que en el particular. Les pido que adopten las medidas que, aunque dolorosas, sean necesarias porque si no hacemos los deberes no habrá futuro. "La crisis económica ha hecho que el empresario sea consciente de que debe internacionalizarse" Centrándonos en la actividad de la Cámara de Comercio. 

¿Es la exportación el mejor camino para la mejora? 

Es uno de los principales. La exportación es imprescindible y España sufre un mal endémico, ya que nuestra balanza comercial presenta un déficit histórico, exportamos menos que importamos. Ciudad Real, sin embargo, por el sector exportador que tiene es de las pocas provincias españolas con saldo comercial positivo. Para seguir incidiendo en esta circunstancia vana actuar este año en una treintena de países.

¿Apuestan por poner a Ciudad Real en el mapa exportador?

 El departamento de Comercio Exterior de la Cámara es muy potente y como sabemos que la internacionalización es algo que debe ir en el ADN de las empresas, nuestra labor es hacérselo lo más fácil posible a aquellos que, con rigor y seriedad, quieran exportar. Para ello, además de las misiones, se dará a las empresas formación y asesoramiento. Ayudaremos en todo lo que podamos a las empresas. 

¿Están preparadas nuestras pymes para dar ese salto? 

La crisis ha hecho saber al empresario que tiene que internacionalizarse. Nuestros productos son muy competitivos y, por ello, solo hay que vencer el miedo a la dificultad que puede tener aterrizar en un mercado extranjero. Ahí entramos nosotros, tenemos que hacer que los empresarios pierdan el miedo y que desaparezcan las barreras en el mercado. Hay que perpetuar nuestra presencia en el extranjero.

¿Cuáles son los mercados con más futuro? 

En el programa que ha planteado el departamento de Comercio Exterior se contempla un trabajo especialmente singular con países como Brasil, Rusia, India, China o Angola. Asia es el futuro porque solamente China tiene un potencial comprador de mil millones de habitantes y con una gran implantación de empresas.

¿Cómo ha vivido la Cámara la situación de crisis de la CEOE y el cambio en su equipo directivo? 

La misión de CEOE y de la Cámara es distinta aunque, lógicamente, desde siempre tenemos una relación de complicidad positiva. En ese sentido, desde la Cámara somos respetuosos con el proceso que se lleve a cabo en la CEOE y mantendremos el máximo nivel de colaboración porque somos complementarios ofreciendo servicios al empresario. El comercio está ligado al transporte y en ello puede ayudar la figura de un aeropuerto. 

¿Qué tiene que decir la situación del Aeropuerto Central de Ciudad Real?

 Sin lugar a dudas, es una infraestructura importante. No obstante, creo que la principal inversión que se debe hacer en Ciudad Real es la apuesta por la pyme y los recursos ponerlos a disposición de la pyme y a  que la estrategia de buscar inversiones milagrosas que saquen adelante la economía hay que desecharlas del imaginario colectivo y saber que la economía sale adelante con la apuesta y la ayuda a los pequeños y medianos empresarios. Dicho eso, en el caso concreto del Aeropuerto lo que entiendo es que en un Momento determinado aparecerá un profesional solvente que esté dispuesto a comprarlo, lógicamente, a un precio lo más barato posible y que podrá ponerlo a medio plazo en funcionamiento con una actividad razonable que, en todo caso, nova a ser la panacea que nos solucione todos los problemas que sufrimos. Los milagros no se dan en economía, solo cabe trabajar. Hablando de las pymes, supongo que será muy importante que entren en vigor las medidas necesarias para que el pago del IVA de facturas pendientes o acaba ahogándolas. Es vital que se aplique el criterio de caja. Es decir, que el IVA se facture cuando se cobren las facturas ya que actualmente muchas empresas sufren impagos, en muchos casos de administraciones públicas, y tienen que afrontar el pago del IVA.

¿Habrá actos importantes con motivo del centenario de la Cámara de Comercio de Ciudad Real?

Lógicamente, tenemos que dar a conocer el centenario y lo haremos con actos serios marcados por un criterio de sobriedad y de responsabilidad. Además, queremos dejar de lado fastos y cohetes y poner en marcha jornadas y conferencias para aportar ideas y soluciones para la salida de la crisis. Queremos hacer actos que tengan una trascendencia positiva para el territorio y nadade alimentar nuestro ego.